La duda como cualidad negativa, genera grandes temores intrínsecos, que crean grandes deformaciones de la realidad.

El ser humano como ser pensante asume que su actitud está bien o está mal, es simplemente cuestión de decisión, ahora bien cuando en nuestro cerebro pasamos ese suiches de prendido y apagado, negro o blanco?, y entra otra respuesta a una pregunta imaginaria, estará bien? ô estará mal?, será así? , lo he hecho bien? , todas estas interrogante la generamos a pesar que sabemos que lo hemos hecho bien o mal, es como el juego de palabra de agilidad mental que descubre la confianza en tu actitud, cerraste la puerta al entrar?, que harías si entras a una oficina de reclutamiento y te hacen esa pregunta.

Entonces si nosotros como seres humanos inteligentes y capaces de ver la realidad sin matices, sin deformaciones, podemos responder esas interrogantes rápidamente de manera afirmativa o negativa, el asunto es que solo debería existir el si o no, el ser positivo es decir el SI, sigue el proceso, pero cuando es negativo o el NO, vuelve a empezar el proceso, pero sin desformar la realidad. Debemos estar claros y entender que una cosa es SEGUIR el proceso y otra cosa es VOLVER A EMPEZAR. 

Ahora bien, cuando tú valores la capacidad que tienes para enfrentar cualquier situación en cualquier nivel, solo dependerá de ti y si estas consienten de lo que has hecho, sin ninguna transformación o mutación de la realidad, serás capaz de reconocer tu aptitud y actitud para resolver o simplemente enfrentar situaciones, entonces el entorno social preparado y capacitado, que ve o escucha lo que tú dices o como tú actúas reconoce y estaría asustado por tu gran potencial.